La lasaña de bacalao con espinacas es una combinación perfecta entre la tradición mediterránea y el toque reconfortante de un plato de horno.
Suave, cremosa y llena de matices, esta receta es ideal para quienes buscan una alternativa diferente a la lasaña de carne o verduras, sin renunciar a un resultado vistoso y delicioso.
Con el bacalao como protagonista, las espinacas aportan frescura y color, mientras que el queso gratinado corona un plato que enamora a primera vista.
Por qué preparar lasaña de bacalao con espinacas
Este plato no solo es sabroso, sino que también es una opción nutritiva. El bacalao es rico en proteínas y bajo en grasas, mientras que las espinacas ofrecen vitaminas, minerales y antioxidantes.
Juntos crean una receta equilibrada, perfecta para toda la familia. Además, es muy versátil y se puede adaptar a gustos y dietas diferentes, desde versiones más ligeras hasta variantes más gourmet.
Beneficios de los ingredientes principales
Bacalao: fuente de omega-3 y proteínas de alta calidad, favorece la salud cardiovascular y ayuda a mantener la masa muscular.
Espinacas: aportan hierro, calcio y fibra, beneficiosos para la energía y la salud ósea.
Queso y bechamel: proporcionan cremosidad y un sabor envolvente, que equilibra el conjunto.
Ingredientes necesarios
Para 6-8 porciones:
- 500g de bacalao desalado y desmenuzado
- 250g de espinacas frescas o congeladas
- 1 paquete de placas de lasaña (frescas o precocidas)
- 1 cebolla mediana picada
- 2 dientes de ajo picados
- 50ml de aceite de oliva
- 500ml de leche
- 40g de mantequilla
- 40g de harina
- 150g de queso rallado (mozzarella o emmental)
- Sal, pimienta y nuez moscada al gusto
Preparación paso a paso
1. Cocinar el bacalao y las espinacas
Cueza el bacalao en agua hirviendo durante 5 minutos, escurra, deje enfriar y desmenuce quitando pieles y espinas. Saltee las espinacas en una sartén con un poco de aceite hasta que reduzcan su volumen y reserve.
2. Elaborar la bechamel
En un cazo, derrita la mantequilla, añada la harina y mezcle bien. Incorpore la leche poco a poco, removiendo para evitar grumos. Condimente con sal, pimienta y nuez moscada, y deje espesar.
3. Montar la lasaña
En una fuente de horno, coloque una fina capa de bechamel, luego placas de lasaña, bacalao, espinacas y más bechamel. Repita hasta acabar los ingredientes, terminando con bechamel y queso rallado.
4. Hornear
Cocine en horno precalentado a 180 °C durante 35 minutos, hasta que la superficie esté dorada.

Trucos para una lasaña perfecta
- Añadir un poco de nata a la bechamel para más cremosidad.
- Usar queso curado para un sabor más intenso.
- Incorporar camarones o gambas para un toque marinero especial.
- Preparar la lasaña con antelación y hornear justo antes de servir para que los sabores se integren.
Cómo servir y conservar
Lo ideal es servir la lasaña caliente, acompañada de una ensalada fresca de hojas verdes. Si sobra, se puede guardar en la nevera hasta 3 días o congelar en porciones. Para recalentar, mejor usar el horno para mantener la textura original.

Variantes de la receta
Lasaña de bacalao con espinacas y calabacín: sustituir parte de las capas de pasta por láminas finas de calabacín.
Versión sin gluten: usar placas sin gluten y espesar la bechamel con maicena.
Opción ligera: cambiar la bechamel por una mezcla de yogur natural y queso rallado, horneando hasta gratinar.
Curiosidades de la combinación
El bacalao y las espinacas no son una mezcla tradicional en la cocina española, pero han ganado popularidad en recetas modernas por su equilibrio de sabor y valor nutricional. Su combinación en platos de horno es perfecta para sorprender a los comensales.
Conclusión
La lasaña de bacalao con espinacas es una receta que une sabor, cremosidad y nutrición en un solo plato. Fácil de preparar, adaptable a distintos gustos y perfecta para ocasiones especiales o comidas familiares, es una opción que merece un lugar en cualquier recetario.