Las tendencias van y vienen, pero tener un piercing sigue siendo increíblemente cool, independientemente del estilo.
Si estás pensando en hacerte un piercing o ya tienes uno, es fundamental tomar precauciones para evitar infecciones y asegurar una curación adecuada. La piel perforada requiere cuidados especiales para evitar complicaciones que puedan afectar tu salud y el aspecto estético del piercing.
Aquí te ofrecemos una serie de consejos prácticos y fáciles de seguir que te ayudarán a mantener tu nuevo piercing limpio y libre de infecciones. Desde la elección del profesional adecuado hasta los cuidados diarios, te guiaremos paso a paso en este proceso crucial para garantizar una experiencia segura y satisfactoria.
Ya sean más extravagantes o más delicados, pueden ser accesorios perfectos para embellecer la cara y el cuerpo.
Ya existen varios productos buenos para el cuidado posterior de los piercings, y aunque estos productos no son caros (y siempre dependiendo del trabajo realizado), puedes limpiar la zona con jabón de glicerina o jabón de pH neutro, todos los días, dos veces al día, mañana y noche, durante al menos un mes.
Cuando aparezca plasma en el piercing – una pequeña costra o secreción que sale del piercing y se pega al mismo- debes aplicar un poco de suero fisiológico en un bastoncillo de algodón, colocarlo encima del plasma sin ejercer presión hasta que la costra se ablande, retirar la secreción y secar bien la zona con un bastoncillo de algodón seco.
Si está situado en la mucosa (boca), debes enjuagarlo con colutorio infantil (porque no contiene alcohol) cada vez que comas, fumes, bebas o incluso te muerdas las uñas, por ejemplo, durante aproximadamente 15 días.
Por supuesto, siempre depende del piercing y de lo que aconseje el perforador corporal.
Si se infecta, o incluso si el cliente sospecha que algo no va como debería, lo primero que hay que hacer es ponerse en contacto con el body piercer que realizó el piercing. Nunca apliques otro producto sin hablar antes con el perforador.
Guía Esencial para la Prevención de Infecciones en Piercings: Consejos y Cuidados
Para evitar que se infecte, es crucial seguir algunas prácticas de cuidado y limpieza.
Aquí te dejo algunos consejos importantes:
- Elegir un profesional calificado: Asegúrate de que el lugar donde te haces el piercing tenga buena reputación, esté limpio y siga todas las normas de seguridad e higiene. El profesional debe usar guantes y material estéril.
- Cuidado posterior: Sigue las instrucciones de cuidado posterior que te dé tu perforador. Esto suele incluir la limpieza del área perforada con una solución salina estéril o jabón antiséptico.
- Lavado de manos: Siempre lávate las manos con jabón antes de tocar el piercing durante el proceso de curación.
- Evitar irritantes: Mantén alejado de productos como lociones, sprays y maquillaje. También es importante evitar piscinas, jacuzzis y baños prolongados en las primeras semanas después de hacerse el piercing.
- No tocar ni girar la joyería: Aunque puede ser tentador, tocar o girar la joyería puede irritar la piel y aumentar el riesgo de infección.
- Ropa adecuada: Usa ropa que no roce ni presione el piercing, especialmente durante el proceso de curación.
- Cambios de joyería: No cambies la joyería hasta que el piercing esté completamente curado, lo cual puede llevar varios meses, dependiendo de la ubicación del piercing.
- Observar signos de infección: Esté atento a los signos de infección que incluyen enrojecimiento excesivo, hinchazón, dolor, calor, pus o fiebre. Si observas alguno de estos síntomas, busca atención médica.
Seguir estos consejos puede ayudarte a asegurar una buena curación de tu piercing y minimizar el riesgo de infecciones.
Tiempo de cicatrización
Cada un tiene su propio tiempo de cicatrización, que depende de la zona en cuestión. Por ejemplo, los lóbulos de las orejas cicatrizan más rápido que los cartílagos o los pezones.
La cicatrización también dependerá de la estabilidad de la piel de la zona perforada, la edad y la salud del cliente, etc.
NOTA – Si se produce alguna reacción en la zona perforada, ponte en contacto inmediatamente con la persona responsable de tu piercing. No se automedique ni siga los consejos de otras personas.