Cuidar la piel no significa pasarse horas por la mañana y por la noche poniéndose crema tras crema y gastando fortunas.
Hay una rutina muy fácil de seguir que establece un auténtico ritual de belleza.
Es tan sencilla que cualquiera puede copiarla todos los días en casa.
Consiste en sólo cuatro pasos, todos ellos básicos y muy rápidos, que se repiten mañana y noche.
Al final del día y en total, dedicamos poco más de diez minutos de nuestro tiempo a estos gestos que marcan la diferencia al cabo de unos años.
¿Cómo debo limpiarme la cara?
4 etapas: limpiar, tonificar, cuidar y proteger
LIMPIAR
Limpiar la piel, mañana y noche, es el primer paso hacia un rostro cuidado.
La limpieza elimina las células muertas y las impurezas acumuladas a lo largo del día por el sudor, el sebo, el maquillaje e incluso la contaminación atmosférica.
La piel limpia absorbe mejor los principios activos de los productos que apliques a continuación, haciéndolos más eficaces.
TONIFICAR
Utilizar un tónico elimina completamente los residuos dejados por el limpiador, ayuda a refrescar la piel y a restaurar su pH, dejando los poros menos visibles.
CUIDAR
Después de limpiar y tonificar, la piel debe ser cuidada e hidratada. Al igual que las etapas anteriores, ésta debe repetirse mañana y noche.
Esta etapa puede subdividirse según las necesidades de cada persona:
Cuidados especiales – Se puede intensificar el efecto de la crema de día/noche utilizando productos conocidos como cuidados especiales (sérums o concentrados), indicados para situaciones específicas, como arrugas, manchas o piel apagada.
Estos productos contienen una mayor concentración de principios activos, lo que acelera la obtención de resultados más eficaces e inmediatos.
Quien prefiera integrar este paso en su rutina de belleza, debe hacerlo todos los días, antes de las cremas de día y de noche.
Ojos
Esta es una zona que debe tratarse con cuidado, ya que la piel del contorno de los ojos es muy fina y delicada, lo que revela los primeros signos del envejecimiento.
Se recomienda utilizar una crema específica para el contorno de ojos por la mañana y por la noche.
El producto debe elegirse en función de la situación que se quiera resolver o prevenir (ojeras, bolsas o líneas de expresión, etc.) y de la edad.
Hidratación – El ritual de cuidado de la piel también incluye la imprescindible crema hidratante, adecuada para cada tipo de piel y edad. Existen cremas de día y de noche, ya que las necesidades de la piel varían a lo largo del día.
Por ejemplo, algunas cremas de día incluyen un factor de protección solar, mientras que las cremas de noche son más nutritivas para ayudar a la piel a regenerarse.
4 – PROTEGER
La exposición al sol se considera la principal causa del envejecimiento prematuro de la piel, por lo que una protección adecuada es esencial.
Muchas cremas de día ya incluyen un factor de protección solar (FPS), normalmente FPS 15, pero es posible que tu piel necesite más protección, sobre todo durante los meses en los que los niveles de UV son más altos.
El protector solar debe aplicarse después de la crema de día o como sustituto.
5 razones para limpiarte la cara a diario
- Limpia los poros para prevenir afecciones cutáneas como el acné.
- Elimina las células muertas de la piel dejando un aspecto fresco y saludable.
- Después de un día caluroso o de trabajo, elimina todo rastro de sudor.
- Un limpiador suave e hidratante que ayuda a calmar la piel irritada o tirante.
- Prepara la piel y le ayuda a absorber mejor la crema hidratante.
Si estas sugerencias te parecen complejas, recuerda que el orden de aplicación de los productos es SIEMPRE el siguiente:
sérum/concentrado > crema de contorno de ojos > hidratante diaria.