Las medusas tienen períodos de aparición estacional. En las aguas españolas la época de máxima abundancia se sitúa entre el comienzo de la primavera y final del verano, permaneciendo el resto del año en la mayoría de las especies en forma de pólipo en el fondo o de huevos de resistencia en el plancton.
El calentamiento global ha provocado que la temperatura de todos los océanos y mares del mundo se haya incrementado lo que ha inducido a que especies que antes no se podían encontrar en las playas españolas, ahora ya sean de lo más común.

La presencia de grandes bancos de medusas que arriban a nuestras costas en verano no es un hecho aislado en el Mediterráneo ni en otros mares del mundo.
Te vamos a dar unos consejos si tienes la mala suerte de toparte con una medusa y que te pique.
Si aún estas en el agua, lo primero que hay que hacer es salir cuanto antes, pero sin perder la calma. El dolor es a veces tan intenso que puede llegar a ‘paralizar’ a la persona, poniéndola en riesgo de ahogarse si no hace intentos de mantenerse a flote. Una vez fuera del agua, hay que retirar los posibles restos de tentáculos
que estén adheridos a la piel, pero siempre con la ayuda de unos guantes. Utiliza suero fisiológico preferiblemente o, en su defecto, el agua del mar, o bien intenta raspar cuidadosamente la zona con el
canto de una tarjeta de plástico.
- Hay que intentar calmar el dolor: para ello, se debe aplicar frio localmente (una bolsa de hielo) durante 15 minutos o echar agua salada sobre la zona. Si el dolor es muy intenso o no cede, hay que acudir al puesto de primeros auxilios o al centro de salud más próximo.
Igual de importante es saber lo que no hay que hacer:
- No hay que frotarse o rascarse porque eso ayudaría a extender el veneno por la piel si hubiera tentáculos adheridos a ella.
- No pongas tus manos sobre la zona afectada; protégelas con unos guantes antes de tocarla.
- No eches ni sumerjas en agua dulce la zona afectada: provocarías la descarga del veneno de las cápsulasvenenosas que tienen los tentáculos. Tampoco eches sobre la zona alcohol, vinagre o amoniaco.
- Nunca pongas el hielo directamente sobre la piel: ademas de poder provocar una quemadura, activaria la descarga del veneno.